"La Intimidad Sagrada: Un Viaje Hacia Uno Mismo y el Placer Auténtico"

¿Por qué participar en una sesión de intimidad sagrada?

Participar en una sesión de intimidad sagrada es ofrecerse una etapa transformadora en tu camino personal y relacional. Aquí hay algunas razones por las que podrías considerar vivir esta experiencia:

Conocerte mejor:
La intimidad sagrada te ofrece un espacio seguro para explorar tus deseos, tus miedos y tus límites, lo que te permite comprender mejor quién eres. La intimidad sagrada puede ayudarte a volver a escuchar a tu cuerpo y darle voz.

Explorar y renacer en tu sexualidad y placer:
Es la oportunidad de descubrir nuevos caminos del deseo y abrazar tu sexualidad de manera auténtica y sin juicio. Vivir nuevas experiencias, pedir lo que nunca te atreviste a pedir, probar, experimentar, jugar sin ningún tipo de expectativa. Tendrás la oportunidad de concentrarte completamente en tu placer, con la atención exclusiva del practicante. Esta nueva (re)conexión con tu cuerpo puede transformar tu vida sexual.

Aprender a ser vulnerable y redescubrir el cuidado:
Aceptar la presencia del practicante, que está allí para apoyarte, puede ayudarte a ser más auténtico y conectarte contigo mismo y con los demás. ¿Quién no ha soñado con dejar caer las barreras, bajar el escudo y derretir las defensas para acceder a la esencia más profunda? Sentirte acogido y apoyado puede cambiar tu forma de relacionarte y ayudarte a reconectar con la necesidad de cuidado.

Continuar tu viaje tántrico y profundizar en ti mismo:
Si ya has explorado el tantra, una sesión de intimidad sagrada puede ser una continuación natural de tu exploración. Estas sesiones te ofrecen la oportunidad de sumergirte profundamente en tu ser interior y descubrir aspectos de ti que tal vez nunca antes habías explorado.

Superar la culpa y la dualidad para abrazar tu cuerpo tal como es:
La intimidad sagrada puede ayudarte a encontrar un sentimiento de unificación y coherencia, donde todo está en su lugar sin necesidad de tomar decisiones. La intimidad sagrada te anima a aceptar y amar tu cuerpo tal como es, sin objetivarlo. Como resultado, podrías sentir un renacer de energía, una mejor percepción y una aceptación incrementada de tu cuerpo.

¿A quién están dirigidas estas sesiones?
Estas sesiones están dirigidas a cualquier persona adulta, independientemente de su género, orientación sexual, estado relacional o los desafíos que enfrentes en relación con la sexualidad. Ya sea que busques mejorar tu vida sexual, psicológica o espiritual, o que desees liberarte de creencias limitantes, la intimidad sagrada puede ofrecerte un espacio para reconectarte contigo mismo y con tu cuerpo.

Ya sea que hayas explorado el desarrollo personal, el tantra, el neo-tantra, las terapias psico-corporales, o no, este paso marcará un giro en tu camino. Si crees en la trascendencia y el poder del cuerpo, la Intimidad Sagrada puede ayudarte a profundizar en tu exploración y descubrir nuevas facetas de ti mismo.

Soy una mujer, ¿qué puedo esperar de mi sesión?
Primero, es la oportunidad de dedicarte un momento solo para ti. Toda la sesión está centrada en ti, en tus deseos, tus necesidades, tu placer.

¿Cuánto tiempo hace que no te ofreces un momento solo para ti?

A veces, en la vida de una mujer, el placer se pone en segundo plano por preocupaciones externas. Según las situaciones, el trabajo, los hijos o la pareja se convierten en la prioridad. Y luego, después de un tiempo, te das cuenta de que te has olvidado de ti misma, que has puesto las necesidades de los demás antes que las tuyas y que eso debe cambiar.

Una sesión de Intimidad Sagrada es una oportunidad única de acceder a tu placer, experimentar nuevas formas de interacción, permitirte explorar tu cuerpo y tu placer para reavivar la llama del deseo y recuperar esa energía vital.

Las oportunidades de explorar tu cuerpo y placer, fuera de cualquier dinámica de seducción o expectativas relacionales (ya sea en una relación existente o futura), no son muchas. A menudo, nuestras exploraciones en pareja están teñidas por el filtro del querer agradar o conformarnos con un entorno, una práctica, una costumbre. Una sesión de Intimidad Sagrada está completamente dedicada a ti y se practica fuera de esa dinámica de aceptación. Te recibo en todas tus facetas, tus luces, tus sombras y tus fantasías.

Soy un hombre, ¿qué puedo esperar de mi sesión?
Como hombre, existen muchas presiones alrededor del placer (hay que saber darlo, hay que tener una erección confiable, hay que "ser bueno en la cama"...). Estas presiones se anclan a lo largo de nuestra vida como hombres y nos generan estrés. Una sesión de Intimidad Sagrada es un momento para liberarte de estas presiones. No hay nada que mostrar, nada que probar, nada que hacer, solo estar presente y abierto a lo que está vivo. Experimentar esta nueva forma de placer puede inspirarte a invitarla en tu vida y generar un cambio duradero en tus deseos y prácticas.

A veces, el sexo se convierte en una droga, y a veces la droga se mezcla con el sexo (hablamos aquí de adicción al porno o Chem'Sex, por ejemplo). Estos trastornos pueden volverse problemáticos. Encontrar serenidad en tus prácticas, descubrir nuevos caminos, ralentizar y sentir, son posibles durante una sesión. Explorar nuevos caminos a veces puede abrir una puerta para salir de una situación que ya no te satisface.

Soy un hombre homosexual, ¿por qué hacer una sesión conmigo?
El camino suele ser difícil para los hombres homosexuales (ausencia de referentes o apoyo familiar, acoso, discriminación y a veces violencia...). A menudo, las dificultades surgen al relacionarse con hombres heterosexuales que cubren sus inseguridades y afirman su "virilidad" con fuerza, incluso con brutalidad. Vivir una sesión de Intimidad Sagrada es darse la oportunidad de vivir suavidad, acogida y amabilidad con otro hombre, fuera de las etiquetas (gay, hetero, bi, etc.), simplemente dos seres que se encuentran y eligen vivir juntos una experiencia.

¿No te sientes identificado con todo lo que se mencionó antes? ¿Las etiquetas, los adjetivos y las categorías no te hablan? ¡Bienvenido/a al club! Para mí, los seres son seres más allá de todas las etiquetas que nos ponen o que nos ponemos a nosotros mismos. Y todos los seres son bienvenidos para compartir los frutos de mi trabajo.